Lunares, la tendencia estrella del verano

Estampado atemporal, ligado a la cultura española, vuelve y vuelve cada vez sin perder un ápice de estilo. Por eso amamos los lunares.

Cuando en septiembre del año pasado vimos los desfiles internacionales de las colecciones de primavera/verano 2020 lo tuvimos claro: los lunares son una tendencia estrella esta temporada. De los desfiles de Nueva York a los de Londres, París y Milán, los topos son uno de los estampados que más amamos las firmas de moda.

Esto es lo que sucede con los clásicos. Que son ajenos a las tendencias. Y aunque a veces no sean tan evidentes o no los veamos tan presentes, los lunares siempre vuelven y esto es así desde hace muchísimo tiempo.

Historia de los lunares

Si echamos la vista atrás, en realidad los lunares tienen su propia historia. Y es muy bonita. A finales del siglo XVIII, unas telas salieron defectuosas de fábrica. Tenían círculos y pequeñas pintitas, que se llamaron topos, en recuerdo a los agujeros que hacen estos animales en el suelo. Aquello no podía venderse a la gente de clase alta. Y las telas con lunares acabaron en manos de gente humilde. Y, especialmente, entre personas de etnia gitana. Echando mano de la imaginación, aquellas mujeres decidieron pintar aún más lunares sobre la tela, para disimular los originales. Además, les añadieron volantes. Poco a poco, aquello se convirtió en parte de su idiosincrasia. Los lunares eran cosa de gitanas y flamencas. Orgullosas, vestían sus atuendos con topos para acudir a las ferias ganaderas a finales del XIX y principios del XX. Las “trendsetter” de las clases pudientes se enamoraron de aquel estampado y empezaron a copiarlo. Y por fin, en 1929, el traje de flamenca se convirtió en el oficial de la Feria de Abril en Sevilla. Y desde entonces los lunares van ligados a la cultura española.

Un básico en los estampados

Pero, una vez traspasadas las fronteras del folclore, los lunares se convirtieron en un print clásico. Como puedan ser las rayas marineras o el estampado animal. Celebrities como Elizabeth Taylor o Marilyn Monroe los popularizaron. Y hoy siguen siendo parte de las pasarelas y la calle.

Hay temporadas en las que se llevan grandes. Otras, pequeños. A veces hasta mezclados. En el omnipresente, bicolor blanco y negro o en otras tonalidades.

Para este verano, en Lolitas& L nos quedamos con el formato XL y tenemos dos propuestas: Un vestido combinado con lunares en la parte de la falda y un vestido camisero con este mismo print, que nos tiene enamorados. Ambos son opciones muy refrescantes para los días de más calor, cuando cuesta decidir qué ponerse y buscamos los tejidos más ligeros del armario.